Esta gama es el resultado de tres elecciones muy concretas, y sienta las bases de nuestra experiencia. Confirma todas las decisiones técnicas que hemos tomado para cumplir dos criterios fundamentales: que la barrica sea siempre la aliada del vino y que podamos reproducir los mismos niveles de calidad año tras año.

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Para ello, solo trabajamos con ensamblajes de madera fabricados y seleccionados por su equilibrio, con una media de 20 meses de secado al aire libre y sin generar ningún tipo de contaminación. Aquí, el ensamblaje se lleva a cabo con madera producida principalmente en la región del centro de Francia.

 

Los tostados, que se consideran la firma de los toneleros, se adaptan a cada caso y varían entre 2 horas y 2 horas y 15 minutos a fuego abierto sin tapa. Unos marcadores aromáticos muy precisos indican las diferentes etapas que hay que respetar y los límites que no hay que sobrepasar: ¡nuestra nariz es la que nos guía!

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El resultado de esta combinación de madera y tostado «húmedo» es una mezcla que matiza y redondea los taninos, aportando dulzura y exquisitez. Juega con el nivel de ácidos grasos, la suavidad, y la estructura en boca. Su polivalencia es la marca de la fábrica.

 

Nuestros tostados ofrecen varios niveles de intensidad y se adaptan perfectamente a sus vinos: MB (blanco), MRL (tinto ligero), MR (tinto).